jueves, 19 de enero de 2012

fetuccini Alfredo



No, no.... no lleva el nombre de mi marido, ni el de mi hijo....

Los Fetuccinis Alfredo :

un plato exquisito que probé en Roma (siendo pasta no podía ser de otra forma, claro), y que tienen fama en todo el mundo.

Allí pude comprobar (por las fotos que tenían en la pared, no porque yo los viera ...), que era un plato al que habían caído rendidos a sus pies personalidades de todos los países, desde reyes, artistas, futbolistas, políticos,.... todos estaban allí fotografiados tomando los típicos "Alfredo".

Por allí pasaron desde Alfred hitchcock, Ava Gardner, Ali Kan, Frank Sinatra, Cristina Onassis, Lucía Bosé, Sophia Loren, Reina de Persia, Reyes de España, Jarabe de palo.... y yo, ¡¡por supuesto¡¡¡, jajjajaj

El servicio del restaurante, debo decir que regulín, y que el plato de pasta te lo cobran como si fuese caviar de Beluga, pero tengo que deciros que la pasta es insuperable.

Dicen que el Restaurante nació el siglo pasado, en los años veinte. Es decir, el original Alfredo, era el abuelo de éste, pero la fama y la receta siguen siendo la misma. El plato surgió cuando la esposa de éste, que acababa de dar a luz a una niña, quedó postrada en una cama, y Alfredo se propuso sacarla adelante, con alimentos ricos en nutrientes. Tanto les gustó, que además de encomendarse a Santa Anna ( protectora de las embarazadas), lo incluyó en el menú de su restaurante, y desde ahí hasta nuestros días ha pasado ya casi un siglo.

Los ingredientes son muy básicos, (pero no podemos dudar que nutrientes si que eran porque calorías tienen un momtón, jajjaja).

Ingrdientes

Fettuccinis (por supuesto frescos)
mantequilla
nata
queso parmesano

¡¡todo muy light ¡¡¡¡




Cocemos los Fettuccinis en abundante agua salada con sal. Lo dejamos al dente, retiramos, escurrimos, y reservamos.


ponemos a calentar unos 175 gramos de mantequilla, a fuego lento.

Una vez derretida añadimos 200 ml. de nata líquida y movemos.




vez mezclado, añadimos al cazo la pasta, y salpimentamos.
Luego añadimos una taza grande de queso parmesano rallado, movemos para que se mezcle la pasta con la mantequilla y la nata, y se derrita el queso rallado, y servimos al instante.

Se suele servir en plato caliente, pues en el mismo, el comensal se pude servir más queso y mezclar ya que se funde rápido y tomar.

Queda un plato de pasta con una salsa suave, y exquisita.





Arrivederci Roma ¡¡¡¡¡¡¡¡¡