domingo, 25 de marzo de 2012

Crema de verduras: Puerros, zanahorias, calabacín






Nada mejor que un buen plato de verduras, para cenar, o para un primer plato en el almuerzo. Las cenas deben ser ligeras pero nadie a dicho que tengamos que descuidarlas y mucho menos saltárnosla. 

Con las verduras tendremos una dieta equilibrada, y además nos aseguramos que obtendremos todos lo nutrientes que necesitamos. 

Muchos alimentos además ayudan a que conciliemos mejor el sueño, como es el caso de la lechuga, y otros vegetales y hortalizas. También la leche ayuda, ya que tiene triptófano y el cerebro lo transforma en serotonina, con lo cual de manera indirecta, nos va a ayudar a conciliar el sueño. 


Yo suelo combinar la leche con la verdura para hacer las cremas. Le aporta nutrientes, le da un sabor más suave, y le evito las calorías de más, si le pongo nata.  También le pongo una patata, y me aseguro la cantidad necesaria de carbohidratos.  


En una cazuela ancha, pongo aceite de oliva, y pongo a pochar la cebolla troceada. No hace falta que estén doradas, simplemente pochadas. 


Incorporamos el puerro cortado en rodajas a la cebolla y vamos dorando también. Luego incorporamos la zanahoria, los calabacines y la patata cortada en taquitos. Vamos dando vueltas con una cuchara de madera, y vamos rehogando lentamente todas las verduras, hasta que tomen color.


Sobre la verdura vertemos un litro de leche. (yo le pongo semidesnatada , y así ahorro calorías). Vamos cociendo lentamente, para que no espume la leche demasiado. 


Le añadimos un poco de sal, pimienta blanca, y un poco de nuez moscada rallada. Dejamos cocer. Si es preciso le añadimos luego un poco de agua. Yo al principio no se la pongo, porque los calabacines suelen soltar un poco de agua, y voy viendo luego a medida que se va cociendo si la necesita o no.


Dejamos cocer hasta que la verdura esté tierna, y luego batimos con la batidora de mano,. Debe quedar una crema no muy caldosa. A mí me gusta espesita,  pero eso ya al gusto. 

Servimos la crema y podemos acompañarla con coscorrones de pan frito.


sábado, 24 de marzo de 2012

Empanada Gallega de carne







En Galicia tienen una diversidad de alimentos de muy buena calidad, con los que regalan el apetito de todos los comensales.


Productos exquisitos los de esa tierra, que se distinguen por sus sabores característicos y por sus texturas. 


Galica no tiene pérdida. Sólo podemos perdernos entre sus fogones, entre sus sabores tradicionales y la sensibilidad especial que tienen para la cocina, que se traduce al final  en platos realmente sublimes.


El mérito de todo ésto radica en sus productos, en recetas de siempre y la máxima sencillez de su cocina.


Hoy me meto de lleno en la empanada gallega, la empanada que hacía mi madre, y mi padre. La empanada que se ha comido siempre en mi casa, con la receta de mis antepasados gallegos. 




La mía es una cocina llena de raíces. La cocina de mi madre nunca tuvo  una estrella michelín, pero sus platos alumbraban la cocina con los reflejos de las mejores estrellas.


Para hacer la masa necesitamos 650 gramos de harina, un vaso de aceite de haber frito la cebolla, (ya frío), un vaso de vino blanco, un poco de sal, un huevo y medio, dos cucharadas grandes de mantequilla, y un sobre de levadura.


Hacemos un volcán con la harina, batimos dos huevos, y utilizamos aproximadamente uno y medio. el otro medio lo dejamos para pincelar la masa antes de hornear. Vamos incorporando los huevos a la harina, y los demás ingredientes. Si quieres puedes mezclarlo primero en un bol grande, e ir moviendo con una cuchara de madera. Luego que estén integrados todos los ingredientes, procedemos a amasar la masa, hasta que quede elástica, y se despegue de los dedos. 


La dejamos reposar envuelta en un paño, por espacio de aproximadamente una hora.




Una vez que ya ha levado, dividimos la masa en dos partes. una un poco más grande, no mucho, ya que será la parte de abajo de la empanada y tiene que tener un poco más para los bordes. Luego amasamos y estiramos. 


Le vamos dando la forma de la bandeja, y recortamos los bordes.




sobre la masa ponemos una base de tomate frito. Si quieres puedes pincelarlo con una brocha de cocina. Sobre éste ponemos un capa de cebollas que ya teníamos pochadas, y que teníamos reservadas ya que el aceite de haber frito las cebollas es el que hemos utilizado para la masa una vez que ya esté frío. Ponemos bastante cebolla.




Sobre la cebolla ponemos una capa de chorizo. Vamos cubriendo toda la superficie.



La siguiente capa es de carne de cerdo en filetes. Preferiblemente ponemos cinta de lomo de cerdo que hemos pasado antes por la sartén, para que ya estén casi hechos. Yo ésta vez utilicé carne que tenía al horno y que me había sobrado, y la cosa no está para tirar nada, aunque me ha resultado más seca que cuando lo hago con los filetes de cinta de lomo que me queda más jugosa.


Sobre ésta ponemos una capa de huevo cocido cortado en rodajas. y cubrimos también toda la superficie.


La última capa que ponemos antes de cubrirla es de pimientos rojos asados, o pimientos morrones.




Ponemos la otra capa de masa que ya tenemos estirada sobre el relleno. y luego cerramos los bordes con la capa inferior, para que no se salga el relleno. 




Hacemos un hueco en el centro de la empanada para que respire y pincelamos con el huevo. pinchamos un poco la masa con un tenedor. Ponemos al horno a 180 grados en el centro y arriba y abajo.




A mí me gusta caliente, fría, recién hecha, al día siguiente.... me la como para almorzar, para cenar, y si sobra, cuando me levanto me la como incluso para desayunar.... 








Con los recortes de la masa que nos sobra, a mí me gusta luego freírlas ¡¡están riquísmas fritas¡¡¡, y luego la espolvoreas con azúcar. Ya me contaréis.





viernes, 16 de marzo de 2012

Filetes de pollo empanados.








Los filetes de pollo empanado son un plato muy veraniego, muy de playa o de campo, que además de fácil es un plato muy socorrido. Es una receta para los estudiantes, esos que sólo comen pasta con tomate, o arroz blanco y ensalada. Las proteínas las ven poco, y si es el pescado, menos. ¿habéis visto a algún estudiante que se haga un pescado al horno por ejemplo?, no ¿verdad?, yo tampoco....

sólo tenemos que tener las pechugas de pollo fileteadas. Podemos aderezarlas con un poco de limón exprimido, y dejarlas así un rato antes de empanar. Yo hoy no se lo he puesto. Sólo les he añadido la sal.



Luego tendremos preparado un huevo para batirlo y poder rebozar los filetes. 

También harina para rebozar y pan rallado.



Pasamos el filete primero por harina, luego por huevo, y finalmente por pan rallado. 



Se fríen en aceite de oliva bien caliente, y se doran por ambos lados. Luego lo ponemos sobre papel absorbente, y ya está listo para comer, acompañado de unas patatas fritas o una ensalada fresquita. O si te vas a la playa, te lo pones en un bocadillo, que está muy rico.....


galletas enviadas para el intercambio de galletas









Éste mes he participad en el primer intarcambio de galletas organizado por Lacasitadelasgalletas. En otra entrada anterior, os enseñé el paquete tan bonito que yo había recibido, y su sabroso contenido.


Hoy os voy a mostrar las galletas que yo he he enviado.


Han ido a la otra punta de España. Desde Cádiz han viajado hasta Tarrasa (Barcelona).


La primera vez me vinieron de vuelta. Algo había mal en la dirección y no encontraron el domicilio.


Las he vuelto a enviar y espero que ésta vez sí que les llegue a Jéssica.


Espero que después de tantas vueltas, aún pueda probarlas. Estában bien cerradas, pero no sé lo que aguantarán. 


Aquí os dejo algunas fotos, para que podáis ver mis galletas, que espero que le gusten a la destinataria.















 Además de las galletas decoradas, le hice unas galletitas de mantequilla para que pueda probarlas sin decorar.






Le puesto también la receta de mis galletas, y le he descrito su elaboración, por si le gustan y quiere hacerlas.




Todas las galletas las he metido en una lata metálica, espero que así le aguanten más, y le envié un molde de silicona de un osito, y otro molde de silicona para hacer bombones. Espero que le guste todo....¡¡¡¡



Pan sin gluten




Por primera vez he hecho un pan sin gluten. 

Ha salido una miga blanca como el algodón, y suave, suave....

Es un poco incómodo manejar la masa, ya que se pega mucho en las manos, pero al final decidí untarlas con aceite para poder manejarla mejor. y la verdad es que me funcionó...

He utilizado dos sobre de levadura de panadero, creo que tienen 4,5 gramos cada uno.

350 cc de agua templada.

he mezclado éstos dos ingredientes, para que se disuelva la levadura.



lo he puesto en la batidora, y los he mezclado con una cucharada sopera de aceite de girasol, y una pizca de sal (aproximadamente un cuarto de cucharadita de café).

Cuando está mezclado, le he ido añadiendo el preparado panificable sin gluten,(medio kilo),  que ya viene preparado y que se compra fácilmente en el supermercado.





Lo he dejado una hora en reposo para que leve, y doble su volumen la masa. Como acababa de hacer una empanada, aproveché que el horno estaba apagado pero todavía caliente, y lo metí dentro, tapado con un paño húmedo. Cuidado que el paño no toque la masa, porque se puede quedar pegada. Yo he utilizado un molde plum-cake, que forré con papel de cocinar. 

A la hora ya ha doblado su volumen, y procedemos a amasarlo de nuevo, para que coja aire. No hay que amasarlo mucho ni darle con movimientos bruscos porque sino luego no sube. 

Lo ponemos de nuevo en el molde con papel de hornear, y lo pintamos con aceite, para poder añadirle las pipas peladas. También le podemos añadir sésamo, semillas de lino....etc... la próxima vez lo voy a intentar con otras semillas para probar los sabores. 


 Ponemos el horno a 180 grados y los dejamos unos 30 minutos. 

Dicen que hay que poner en el horno un recipiente con agua, para que no pierda la humedad, pero a mí se me ha olvidado. Aún así me ha salido esponjoso, y tierno, y al pintarle la superficie con el aceite de oliva, la corteza ha quedado crujiente, que es algo de lo que siempre se queja todo el mundo, que la superficie queda blanda... pues he probado con el aceite y el resultado me ha encantado....




Si queremos podemos congelarlo, y guardarlo en varias porciones, para ir sacándolo a medida que lo usemos. Sigue quedando suave y tierno, y cuando recupera la temperatura normal sigue quedando esponjoso. Os lo aseguro.