miércoles, 14 de diciembre de 2011

receta de galletas

Aynsss¡¡¡¡¡, en una entrada anterior os dije que os ponía la receta de las galletas, y me puse a escribir y a colgar las fotos y se me olvidó. Pero tengo una amiga que se llama Nuria, que me la pedido por el Faceboook, y cuando he vuelto al blog. ¡¡¡oh, sorpresa¡¡¡, es cierto, se me había olvidado ponerla.

Bueno, pero eso tiene remedio,. Aquí la tienes Nuria, y espero que me cuentes cómo te han salido.






Ingredientes:


  • 275 grs. de harina
  • 125 grs. de azúcar glass
  • 150 grs. de mantequilla (no sustituir por margarina, por favor) (ah, y que sea sin sal)
  • 1 huevo,
  • una pizca de sal
  • una cucharada sopera de leche
  • una cucharada de azúcar vainillado

En un bol cascamos el huevo y lo mezclamos con el azúcar glas tamizado con el azúcar vainillado, hasta que el color del huevo con el azúcar se vea blanquecino.

Pasamos toda la harina por un colador fino, y la tamizamos. Luego la echamos sobre el huevo de una vez, y mezclamos. La mezcla debe parecer arena húmeda. 

Le añadimos en el centro la mantequilla que tenemos cortada a cuadraditos y vamos amasando poco a poco con las manos.



Luego la he dividido en tres partes iguales, y cada una de ellas, las he puesto entre dos rectángulos de papel para horno. Luego se pasa el rodillo por encima, hasta dejarla de medio centímetro de grosor. Cuando esté la masa lisa y con el mismo grosor por todos lados, la metemos al congelador entre los dos papeles de hornear, sobre una superficie plana. Deben estar por lo menos una hora en el congelador.  

Cuando haya transcurrido ese tiempo, la sacamos y esperamos unos cinco o diez minutos. como ya estaba estirada, podemos cortarla con los cortapastas y colocarlas en la bandeja de horno



Yo no la he engrasado, pues noté que la masa ya estaba bien aceitosa, y la verdad es que no ha hecho falta. Se han despegado luego con facilidad. 

Las colocamos en el centro del horno a una temperatura de unos 180 grados, y las dejamos unos 20 minutos. 

No abrir el horno en los diez o doce primeros minutos. 

Luego vigilar y cuando estén doradas, las sacamos con una éspatula de silicona y salen sin dificultad y sin pegarse.  Las podemos guardar en una caja metálica de esas que todo el mundo tiene guardadas de las galletas holandesas del carreforur, y así no se nos pondrán blandas fácilmente.

para poderlas decorar, las tenemos que dejar enfriar un rato, y luego podemos decorarla con fondant o con glasa.

Ésta receta es la que suelo hacer siempre. Es la que más me gusta, y es el resultado de varias modificaciones de una receta antigua que tenía de Eva Arguiñano.

1 comentario:

Loli dijo...

Que pinta tan rica tienen esas galletitas y que bonitas te han quedado
Un beso